La Fiscal Auxiliar, Claudia Romero del Ministerio Público, demostró con pruebas fehacientes la negligencia médica y por ende, la culpabilidad del cirujano plástico David Páramo por los delitos de lesiones imprudentes y lesiones psicológicas graves, en perjuicio de Allison Molina.
En los alegatos concluyentes, en la última audiencia de juicio oral y público en contra del doctor David Páramo, la Fiscal Romero especificó todas las pruebas que implicaban la culpabilidad del acusado, detallando que unos de los errores graves cometidos por el cirujano, fue darle de alta a la víctima, cuando se dio una complicación médica durante la cirugía, lo que desencadenó problemas respiratorios en la misma.
Asimismo, la Fiscal Romero presentó el testimonio fundamental de la víctima aduciendo que cuando el acusado le dio de alta, ella le había mencionado que se sentía mal que se le dificultaba respirar y él aun así la envío a su casa, sin la debida precaución de dejarla hospitalizada dentro de las 12 0 24 horas posterior a la cirugía y de realizar estudios complementarios post operatorios, como una placa de tórax, para descartar si tenía o no un hemotórax.
A sabiendas que le había causado a la víctima una ruptura en la pleura (hemotórax) que es la capa del tórax que recubre los pulmones, hizo que se expandiera más de lo normal el pulmón, provocándole problemas al respirar, lo cual quedó demostrado y establecido en la auditoría médica y los testimonios de los médicos forenses.
“El acusado aumentó el riesgo, porque primero le hizo una sutura que no debió haberle hecho y segundo la hizo mal, porque si la ha hecho bien ella no regresa, él tuvo el deber de llamar a otro cirujano general para colocar una sonda pleural a través de la pared del tórax con el fin de drenar la sangre y el aire. La sonda se deja puesta durante varios días para volver a expandir el pulmón.”
Otra de las pruebas testimoniales, fue el del cirujano plástico, parte de la auditoría médica quien afirmó que cuando se presenta una complicación médica, como la que le sucedió al doctor Páramo, la cirugía estética pasa a un segundo plano, pero él suturó y colocó mal el implante, porque lo colocó sub mamario y no es lo correcto, por ello el seno izquierdo le quedó más caído, más flácido y el implante rebotando, a esto sumándole el tipo de cicatriz que le hizo de 7 hasta 9 centímetros de ancho.
Con respecto al dictamen de la Psicóloga Forense Ana Luisa Pineda Rocha, se dejó claramente establecido que hay una afectación psicóloga producto del trauma de la cirugía, que hubo un nexo causal entre lo que ella relató y el diagnóstico que la psicóloga realizó.
[su_carousel source=»media: 3403,3405,3406,3402″ limit=»13″ width=»800″ height=»240″ responsive=»no» title=»no»]
Por lo tanto, la Jueza Karen Chavarría, titular del Juzgado Octavo Local Penal de Managua, declaró culpable al acusado David Páramo por lesiones imprudentes y lesiones psicológicas graves.
Durante el debate de pena, el Ministerio Público solicitó la pena máxima para cada delito, lo cual se detalla de dos años por lesiones imprudentes y dos años por lesiones psicológicas graves, más la inhabilitación del ejercicio de la profesión médica por tres años.
Además, dentro de los alegatos del Ministerio Público se estableció que la víctima necesita una reparación al daño causado, por lo que se deja abierta la vía civil.
En su sentencia, la Jueza Karen Chavarría explicó que el acusado Páramo cumplirá la pena de tres años, un año por lesiones imprudentes y dos años por lesiones psíquicas graves causados a la víctima Allison Molina.
