El Doctor Julio Bolaños, Fiscal Auxiliar de la Unidad Especializada Contra los Delitos de Violencia de Género del Ministerio Público, representó con ahínco a la víctima de femicidio frustrado Seylit Yecalin Parrales Selva, quien sobrevivió de milagro, gracias al actuar de las personas que la auxiliaron en el lugar donde ocurrieron los hechos.
Relación tormentosa desde el inicio
La joven Seylit Yecalin Parrales de 26 años de edad, jamás imaginó que su ex cónyuge cumpliera con sus amenazas de quererle quitar la vida, ya que en constantes ocasiones la amenazaba de que si lo dejaba, iba a matarla a ella, a su pequeña hija y a su madre, por lo que un día tomó la decisión de dejarlo y regresar a la casa donde habitaba con su madre.
Una vez que la víctima Seylit Parrales se separó definitivamente del acusado Yerol Josué Alvares Rojas, éste comenzó a hostigarla a través de llamadas telefónicas y mensajes de texto diciendo: “Si no regresas conmigo te voy a matar” transcurriendo de esta manera el tiempo en el que el acusado no dejaba en paz a la víctima, manteniéndola en un estado de terror, miedo y angustia ante el cumplimiento de las amenazas que podía ejercer el acusado en contra de ella, su hija y su mamá.
19 de agosto del 2019 día fatídico para Seylit Parrales
Aproximadamente a las siete y media de la mañana, cuando la víctima se encontraba en el patio trasero de su casa de habitación, en compañía de sus hermanas y madre, se percató que el acusado estaba en el portón principal de la vivienda quien gritaba “Seylit abrí, abrí Seylit”, por lo que la víctima atemorizada al escuchar los gritos salió corriendo a su cuarto, entró y cerró la puerta del mismo para evitar que el acusado le hiciera daño, pero éste logró quitar el seguro del portón y entró a la vivienda y se dirigió al cuarto de la víctima, abrió la puerta con fuerza y violencia; en ese momento el acusado sacó de la bolsa delantera del pantalón una navaja de color negro de 21 centímetros de largo con la que arremetió en contra de la víctima, propinándoles múltiples navajazos en el cuerpo de la misma.
Fue en ese momento que interfirió la hermana de la víctima al ver a su hermana ensangrentada, por lo que agarró un garrote y con el mismo le dio varios golpes al acusado para que soltara la navaja y en ese instante el acusado también la hirió en ambas manos y continuó propinándoles navajazos a su ex pareja a Seylit Parrales en su abdomen, pecho, cuello y tórax.
Al seguir lastimando a Seylit Parrales, el acusado le decía: “voy a matar a la niña”, razón por la cual la hermana de la víctima corrió a buscar a la niña, y salió con ella en brazos pidiendo ayuda a los vecinos. Dejó a la niña en casa de una vecina y regresó a la casa y el acusado ya no se encontraba, solo la víctima ensangrentaba y medio inconsciente, saliendo del cuarto de la casa y fue auxiliada por los vecinos quienes la trasladaron al hospital Fernando Vélez Páiz.
Dictamen de Medicina Legal
De acuerdo a la valoración del médico forense, las lesiones pusieron en peligro la vida de la víctima, debido a múltiples heridas por arma blanca en cuello, tórax y abdomen, lo cual requirió transfusión masiva de sangre, intervención quirúrgica. Igualmente presentó lesión de estómago, dejando cicatrices visibles y permanentes en la víctima, todo esto producto de las veintiún navajazos que el acusado le propinó a la víctima.
Admisión de hechos
En audiencia de juicio oral y público, el acusado admitió los hechos que le imputó el Ministerio Público declarándole culpable el Juez Edén Enrique Aguilar Castro, del Juzgado Tercero de Distrito Especializado en Violencia de Managua, por el delito de Femicidio en grado de Frustración y condenado a 20 años de prisión y a recibir orientación, atención y prevención dirigidos a modificar conductas violentas y así evitar la reincidencia.
