La Fiscal Belissa María Martínez Sanabria, de la Unidad Especializada en delitos contra la violencia de género, del Ministerio Público realizó audiencia preliminar contra el acusado Bismarck Ali Carvajal Zamora por el delito de parricidio en concurso real con el delito de violación agravada en perjuicio de la adolescente de iniciales L.M.C.M (q.e.p.d) hija del acusado.
Admisión de la acusación
En la audiencia preliminar la jueza Aleyda Irías Mairena, del Juzgado Segundo de Distrito Especializado en Violencia de Managua, admitió la acusación presentada por el Ministerio Público por ser clara y precisa en cuanto a la descripción de acciones que ubican al acusado ejerciendo las mismas, puntualizó la juez Irías.
En la acusación se detalló como el acusado empezó agredir sexualmente a su hija adolescente en reiteradas ocasiones y hasta que en la última agresión le colocó una faja de cuero hasta asfixiarla y matarla.
De igual manera la jueza Irías mantuvo la prisión preventiva para el acusado por los hechos descritos en el pliego acusatorio, debido a la gravedad de los delitos por lo que el acusado podría querer evadir la justicia.
Asimismo se programó audiencia inicial para el próximo 14 de Junio del año 2021.
Las agresiones sexuales empezaron desde el año 2015
De acuerdo al relato de los hechos, descritos por el Ministerio Público, el acusado Bismarck Carvajal Zamora empezó a tener un comportamiento abusivo y controlador hacia la víctima que en ese momento tenía 12 años de edad e inició la agresión sexual hacía la víctima cuando se mudó a vivir con él y su madre en el Residencial Belén, en Managua.
Durante seis años agredió sexualmente de su hija
En fecha 10 de mayo del año 2021, la mamá de la víctima que se encontraba en su centro laboral recibió una llamada de su vecina Cristina del Socorro Aguirre quien le dice: “que estaba preocupada, porque el día anterior la víctima le dijo que iba a tomar una decisión”. Por lo que ella llamó al acusado donde le refirió lo que aparentemente la joven iba a hacer (irse de la casa con un novio).
Acto seguido, el acusado le pidió permiso a su jefe para regresar a su casa alegando problemas familiares, por lo que tomó su carro y durante el trayecto de su lugar de trabajo a su casa llamó a la víctima para que se quedara en su casa, que su tía iba a llegar por que supuestamente había sido agredida por su pareja sentimental.
Al llegar a su casa en residencial Belén, estacionó su carro dentro del garaje de la vivienda y el acusado ingresó a la misma y aprovechando que su hija estaba sola en la casa, se dirigió al cuarto de la víctima, y volvió agredirla sexualmente y después tomó una faja de cuero de color negro y la colocó alrededor del cuello de la víctima, por lo que la víctima trató de forcejar con el acusado, pero ante la superioridad de fuerza física del acusado con la víctima , el acusado logró sujetar la faja con fuerza hasta lograr asfixiarla privándola de la vida.
Después, el acusado para eliminar las evidencias procedió a cargar el cuerpo de la víctima, se dirigió al patio y colocó el cuerpo de la víctima sobre el asiento trasero del vehículo.
Y con el propósito de no ser vinculado con la muerte de su hija, el acusado abordó el vehículo antes descrito, dirigiéndose a la comarca Sabana Grande y en un predio baldío, que se ocupa como basurero, dejo el cuerpo de la víctima y se retiró del lugar regresando a su trabajo como si nada había sucedido.