La Fiscal Auxiliar Belissa Martínez, de la Unidad Especialidad contra los Delitos de Violencia de Género del Ministerio Público, logró con pruebas fehacientes demostrar la culpabilidad del acusado José Antonio Castro Muñoz por el femicidio de Ingrid de los Ángeles Baltodano Pérez (g.e.p.d) y por el delito de amenaza con arma en perjuicio de Loxan José Espinoza Sanchez.
Durante la audiencia de juicio, en el Juzgado Segundo de Distrito Especializado en Violencia de Managua, el acusado José Antonio Castro admitió los hechos que le fueron imputados por el Ministerio Público, declarándolo culpable la jueza Aleyda Irías Mairena por los delitos de femicidio en concurso real con el delito de amenazas con armas.
En el debate de pena, el Ministerio Publico pidió la prisión máxima
La Fiscal Martínez, durante el debate de pena, dado a la magnitud del odio y misoginia con que el acusado privó de la vida a la víctima al propinarle 10 machetazos en sus miembros superiores e inferiores y la cabeza, se demostró su menosprecio a la vida de la misma. Es por ello que se pidió la pena de prisión perpetua revisable, la cual fue aprobada por la Asamblea Nacional con la Reforma y Adición al Código Penal de la República de Nicaragua y a la Ley 779, Ley Integral contra la Violencia hacia las Mujeres, dicha pena es para los que cometen delitos de extrema gravedad y extrema peligrosidad.
El artículo 96. de la Ley No.1058, Ley de Reforma y Adición al Código Penal de la República de Nicaragua y a la Ley 779 y de Reformas a la Ley 641. establece la libertad condicional en prisión perpetua revisable cuando se haya cumplido 30 años de efectiva prisión y cuando se haya observado buena conducta en el centro penitenciario y exista un pronóstico favorable de reinserción social.
El acusado privó de la vida a Ingrid de los Ángeles Baltodano (q.e.p.d) de una forma cruel e inhumana
En el año dos mil quince, el acusado José Antonio Castro Muñoz, comenzó a enamorar a la víctima cuando ésta tenía la edad de 13 años, iniciando una relación de noviazgo, la que no era del agrado de la madre de la víctima, sin embargo, la pareja mantuvo la relación, hasta que la víctima salió embarazada y en abril del año 2017 cuando nació una niña se fueron a vivir juntos a la casa del acusado ubicada en el Departamento de Managua, municipio de San Rafael del Sur, y fue para el año 2019 que tienen a su otro hijo.
La conducta del acusado, en fecha 10 de junio del año 2020, comenzó a ser posesiva, ejerciendo actos de control sobre la víctima, al prohibirle que saliera de la casa, que no fuera a visitar a su mamá y mucho menos a su tía Joma Pérez, ya que le habían informado que la víctima andaba con un hombre, esta situación generó que el acusado la encerrara en el cuarto de su casa y la agrediera físicamente.
Asimismo, el acusado continuó amenazándola y le decía: “Que le iba a volarle la cabeza a ella y a los dos hijos de ambos si él confirmaba que ella andaba con otro hombre y que después de volarles la cabeza a todos se las iría a tirar a la casa de la madre de la víctima”.
Además la denigraba diciéndole “Sos una botada, que no servís para nada” motivo por el cual la víctima Ingrid de los Ángeles Baltodano Pérez, a través de un vecino le mandó un papel a su mamá Marisol Pérez para que fuera a traerla porque temía por su vida y la de sus hijos, esta situación provocó que el acusado la siguiera hostigando, asediando, controlando todo lo que realizaba la víctima.
A finales del mes de diciembre del año 2020, la víctima conoció a Loxan José Espinoza Sánchez, entabló una relación de amistad y a finales de enero del 2021 comenzaron una relación afectiva (noviazgo).
La buscó para matarla con un machete que portaba
El 28 de febrero del corriente, a eso de las siete de la noche, la víctima Ingrid de los Ángeles Baltodano Pérez, se encontró con Loxan José Espinoza Sánchez y cuando iban propiamente frente a la Iglesia la Trompeta del Barrio Julio Buitrago, se encontraron con el acusado José Antonio Castro Muñoz, quien iba a bordo de su bicicleta BMX.
Fue cuando el acusado se dirigió hacia la víctima y le expresó ¿que necesitaban hablar?, contestándole ella “que no tenían nada que hablar, que las cosas estaban claras y que ya no quería nada con él”, el acusado, comenzó a llorar y le rogó que lo perdonara por lo mal que se había portado con ella, pero la víctima le contestó “que estaba decidida, que ya no quería absolutamente nada con él”, el acusado al ver que perdió el control y dominio sobre la víctima, la amenazó y le gritó “tenelo por seguro que quien te mata soy yo, te voy a volar la cabeza hoy o mañana no sé cuándo, pero te voy a volar la cabeza, eso tenelo por seguro” y se retiró del lugar.
Seguidamente, la víctima Ingrid de los Ángeles Baltodano Pérez y el joven Loxan José Espinoza Sánchez, se dirigieron hacia la Farmacia San Payo a comprar un medicamento y al salir observaron que el acusado José Antonio Castro Muñoz, andaba rondando el sector .
Posteriormente, el acusado con toda la intención, la voluntad y el ánimo de privar de la vida a la víctima, detuvo la marcha de la bicicleta y sacó un machete de metal cacha color negro de 66 cm de largo y con el que procedió a dar dos machetazos sobre el pavimento.
Después el acusado se dirigió hacia donde estaba la víctima y Loxan José Espinoza Sánchez, gritándole la víctima a Loxan José Espinoza Sánchez, que se corriera, éste último se levantó y corrió sobre el boulevard.
Simultáneamente, la víctima salió corriendo a fin de resguardar su vida y se dirigió hacia unos árboles y del miedo y tensión del momento por perder su vida, la víctima se cayó al suelo, condición que aprovechó el acusado y procedió a utilizar el machete que portaba y le realizó varios machetazos al cuerpo de la víctima, al dirigir los machetazos a la cabeza, rostro, tórax, brazo y otras partes del cuerpo.
Logrando impactarle la cabeza hasta fracturar la misma y una vez que consumó su macabro plan el acusado salió del lugar corriendo y dándose a la fuga, mientras la víctima era auxiliada por personas del lugar, que la trasladaron al Hospital, falleciendo posteriormente.
Se estableció como causa directa de su muerte trauma craneoencefálico severo, por heridas por arma blanca, tipo contuso cortante, penetrante en cráneo.